No en pocas ocasiones se ha hablado del cine español como aquel que durante años supo sostenerse gracias a la sabia interpretación de sus actores; talentosos artistas que encarnaban a los distintos personajes de un guión (no exento en la mayor parte de los casos de cierta carga de sentimentalismo) válido por sí mismo para sostener una historia que bien podríamos estar presenciando en las tablas de cualquier teatro. "La isla interior" podría ser un buen ejemplo de todo esto, un ejemplo de cómo el cine puede ser concebido sin artificios de ningún tipo, de como una cinta puede llegar a convencer con tan solo la mirada ahogada de uno de sus actores, de unos intérpretes dirigidos de un modo más que acertado por Dunia Ayaso y Félix Sabroso en una nueva incursión de los mismos en el siempre difícil género dramático. Y eso cuando se habla de un tema tan delicado como es la esquizofrenia y los efectos que la misma provoca en el interior de una familia rota, se antoja fundamental.
Son por tanto los actores los máximos responsables del resultado final de esta película: Una excelente Geraldine Chaplin que se encuentra con un papel bastante más largo que aquellos a los que nos tenía acostumbrados, un Alberto San Juan cuyo cambio de registro no muestra fisura alguna o una Candela Peña que borda de nuevo un personaje atormentado y falto de cariño como sólo ella sabe hacerlo.
"La isla interior" no peca de excesivo sentimentalismo, es una reflexión dura sobre los vacíos, carencias e inseguridades que arrastramos muchos seres humanos, unos vacíos que encuentran aquí su plena justificación en una enfermedad psíquica tan recurrente como posiblemente innecesaria. Su buen tratamiento y su correcto ritmo favorecen el desarrollo de una historia dura pero con ciertos guiños tragicómicos. No podía ser de otro modo llevando el sello de la casa "Ayaso-Sabroso"...
Místico
14/04/2010
Son por tanto los actores los máximos responsables del resultado final de esta película: Una excelente Geraldine Chaplin que se encuentra con un papel bastante más largo que aquellos a los que nos tenía acostumbrados, un Alberto San Juan cuyo cambio de registro no muestra fisura alguna o una Candela Peña que borda de nuevo un personaje atormentado y falto de cariño como sólo ella sabe hacerlo.
"La isla interior" no peca de excesivo sentimentalismo, es una reflexión dura sobre los vacíos, carencias e inseguridades que arrastramos muchos seres humanos, unos vacíos que encuentran aquí su plena justificación en una enfermedad psíquica tan recurrente como posiblemente innecesaria. Su buen tratamiento y su correcto ritmo favorecen el desarrollo de una historia dura pero con ciertos guiños tragicómicos. No podía ser de otro modo llevando el sello de la casa "Ayaso-Sabroso"...
Místico
14/04/2010
2 comentarios:
Disfruté mucho de la peli, tanto que mi entrada esta relacionada con ella. Destaco como tu los trabajos de Alberto San Juan y Candela Peña.
Sabías que todos los actores principales, incluido el padre, tienen un goya? ha sido una de las cosas que han destacado de esta pelicula.
Fui con gente que pensaba que nos le iba a gustar este tipo de historias y salieron encantados.
Un abrazo mi querido místico
Pues la verdad es que no había caído en ello. Muchas gracias por aportarnos ese interesante dato, Bimbi.
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