Trabajaron juntos en la (hasta la fecha) película más importante del actor neozelandés: "Gladiator". Años después, con títulos como "Un buen año", "American Ganster" o "Red de mentiras" se volvieron a encontrar. En este 2009, en la que ya será su quinta participación juntos, Russell Crowe y Ridley Scott vuelven a unir sus nombres en una historia sobradamente conocida pero que cada cierto tiempo plantea su revisión: la de aquel famoso arquero de la Inglaterra del siglo XII llamado Robin Hood.Tras un periodo de adaptación física necesario para interpretar al personaje en cuestión (llámese ponerse en forma y, sobre todo, perder peso), Russell Crowe por fin ha podido enfundarse el traje de tan famoso personaje. Es de recibo reconocer, tras echar un vistazo a las fotos correspondientes, que pese al esfuerzo que le supuso al actor cumplir los requisitos necesarios, el resultado final resulta cuanto menos creíble. Y es que a sus 45 años recién cumplidos, el que otrora iterpretara a uno de los esclavos más famosos del cine, se erige de nuevo como héroe épico encabezando un reparto en el que también encontramos nombres como los de Cate Blanchett o Vanessa Redgrave.
Han pasado 18 años desde que Kevin Costner interpretase por última vez a este personaje. De aquella película nos quedó al menos una canción para el recuerdo. Me conformaría con que 20 años después de esta propuesta de Scott recordásemos al menos una sola de sus imágenes. Me temo, no obstante, que la historia está ya tan trillada que la empresa se antoja cuanto menos difícil. Es lo malo de explotar los relatos hasta la más absoluta saciedad.
Místico
27/04/2009
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