
Y lo hago porque quedé tan fascinado por la misma que no comprendo cómo no ha tenido mayor repercusión este año en cuanto, por ejemplo, a premios se refiere (Oscar incluidos). Creo firmemente que la película de Sam Mendes es una de las mejores poducciones que se han llevado a cabo a lo largo de todos estos años, que las interpretaciones de Kate Winslet y Leonardo di Caprio (y creía que nunca diría esto de él) son absolutas merecedoras de los más prestigiosos premios y que su guión, pese a su extrema sencillez (o quizá gracias a ello), es una obra maestra.
A lo largo de dos horas pude escuchar algunas frases que posiblemente tendré grabadas a fuego el resto de mi vida, que me hizo comprender algunas facetas de ciertas relaciones que, ocultas por un convencionalismo social y una vida absolutmente ajena a ellas, se han mantenido escondidas a lo largo de los años.
"Revolutionary Road" narra las frustraciones de una vida que simplemente no se vive, de una aceptación de los convencionalismos sociales que obliga a sus protagonistas a ser una silueta más entre el maremágnum de hombres grises que acuden cada día a sus puestos de trabajo, a la resignación de vivir lo que los demás esperan, a la renuncia de los verdaderos sentimientos y de los sueños inalcanzables, inalcanzables porque no se debe acceder a ellos al no formar parte de la vida que ya nos tenían programada.
Un título que supuso el reencuentro de Leonardo di Caprio y Kate Winslet más de una década después de"Titanic" y que para muchos de nosotros supuso también otro reencuentro: el que tuvimos con otras vidas que quizá no sean tan ajenas como en el fondo nos gustaría.
Místico
10/03/2009
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